Arte x la Identidad en las calles de Contralmirante Cordero

Contralmirante Cordero es un pueblito muy chico ubicado al norte de la Patagonia. Ayer al mediodía viajamos con el grupo de "Arte por la Identidad" a la Escuela Primaria nº 135 para compartir los talleres de plástica, murga y teatro que venimos haciendo. La idea del encuentro fue más que nada transimitirle a los chicos lo que aprendimos en este tiempo para que ellos continuen allá con todo esto. Ahora nos tocaba ser profesores.

Cuando llegamos nos recibió la directora de la escuela nº 135, el lugar donde ibamos a realizar las actividades. Había chicos de todas las edades. Lo primero que hicimos fue armar una ronda para ordenarnos un poco porque eramos más de 80 personas ahí adentro. Después la profe Ely Romero propuso unas actividades que tenían que ver con el teatro para que nos fueramos sacando un poco la vergueza y nos conocieramos entre todos.

Nos mezclamos con los niños de la escuela y algunos grandes que no quisieron quedarse afuera. La consigna era armar en solo diez minutos una presentación con los nombres de todos, pero además decirlos cantando y bailando. Algunos chicos estaban bastante tímidos, pero de a poco se fueron soltando y en solo un ratito logramos armar una presentación con un poco de teatro y canto.

Después de reírnos mucho con todas las presentaciones volvimos a separarnos en grupos, esta vez para hacer una murga. Algunos se fueron a armar la letra de la canción, otros a bailar y otros (casi todos los niños) al grupo de percusión. La verdad es que los chicos nos sorprendieron bastante porque aprendieron los ritmos más rápido que nosotros. En menos de dos horas se había armado una gran murga que salió a cantar y bailar para ganarle al viento, por las calles de Contralmirante Cordero.

Una vez que terminamos de vueltear por las calles volvímos a la escuela. Nos estaban esperando para merendar con una chocolatada caliente, riquisima. Hicimos de nuevo una ronda y llegó la hora de despedirnos. La gente de Contralmirante Cordero agradeció nuestra presencia y nos invitó a volver cuando quisiéramos. La directora de la escuela le preguntó a los chicos si querían continuar con la murga y todos respondieron en forma de coro "siii".

Nosotros, al igual que los docentes y alumnos de la escuela quedamos muy contentos de compatir con los chicos esta jornada. Pero además, lo que más felices nos pone es saber que ellos van armar ahora su propia murga.